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domingo, 13 de julio de 2008

NECROPOLIS DE LOS ALGARBES TARIFA

La Necrópolis de los Algarbes es uno de los complejos arqueológicos más importantes de la provincia de Cádiz del Calcolítico y de la Edad del Bronce (datado hacia fines del III milenio a.C.). Este conjunto lo forman medio centenar de estructuras funerarias y cuevas artificiales en forma de cámara circular con entradas a diversos niveles. Dos de éstas se encuentran a ambos lados de un amplio corredor tallado en la roca arenisca. Estos últimos corresponden por su estructura a una gran pieza adintelada relacionable con los enterramientos megalíticos de galería cubierta. Existen sepulturas del tipo cupuliforme con acceso lateral y otras con entrada vertical, a manera de pozo o silos. El yacimiento alberga también dos sepulturas que difieren totalmente de las anteriores. Se trata de tumbas antropomorfas.
La necrópolis ha sido excavada por Carlos Posac Mon entre los años 1967 y 1972 y los ajuares encontrados son de gran riqueza. En ellos abundan las vasijas de cerámica. También se han documentado piezas de bronce, marfil y de oro, así como industria lítica, tanto tallada como pulimentada, objetos de adorno, formados principalmente por colgantes y discos perforados, fabricados en conchas de moluscos.




Conjunto de cuevas artificiales
y construcción megalítica.












Varias vistas parciales
de la Necrópolis.


Interior de la
Sepultura Nº1.


Plano de la Sepultura Nº 1.
Ajuar de distintas sepulturas:
industria lítica
(hachas pulimentadas, lascas de sílex)
y cerámica.

SITUACIÓN ACTUAL DEL YACIMIENTO (1999) :

Restos fenicios, romanos, árabes y medievales de ocupaciones posteriores hacen de este yacimiento merecedor de estudios antropológicos profundos. Hasta hace unos cincuenta años en las cuevas grandes vivía todavía gente (la última familia que las ocupaba era conocida con el apodo "Los Cachorros"). Otras cavidades eran utilizadas para guardar cerdos y cabras hasta hace muy pocos años. Es decir, muchas de las cuevas eran conocidas desde siempre por los campesinos y nadie se daba cuenta de su importancia arqueológica hasta la repoblación de los alrededores con eucaliptos en los años sesenta. Durante estos trabajos una máquina desplazó una piedra de gran tamaño, poniendo al descubierto una sepultura prehistórica ( Sep. Nº 1 ) que contenía un esqueleto y un ajuar compuesto por cerámica e industria lítica.
Hace más de treinta años, en 1.967, D. Carlos Posac Mon empezó las excavaciones con un presupuesto y medios que hoy día harían reír a cualquiera. Eran tiempos en que la palabra arqueología se escribía en nuestro país con minúsculas. Los trabajos se dividieron en varias campañas que duraron sólo unas pocas semanas, la última en 1.972. Durante una de las campañas incluso no pudo realizar ningún trabajo a causa de lluvias torrenciales y la mayor parte del tiempo en las otras campañas tuvo que frenar a los trabajadores, campesinos de la aldea cercana que sólo estaban acostumbrados a utilizar pico y pala para trabajos duros del campo. En estos trabajos colaboró también el ya desaparecido D. Matías Ruiz Romera. En 1.975 D. Carlos Posac Mon publicó ( 1 ) los espléndidos ajuares encontrados en diez sepulturas.
Casi dos décadas más tarde, en 1.990 se llevó a cabo otra intervención arqueológica, basada en un convenio de cooperación de la Diputación Provincial con el INEM. Este proyecto - supervisado por Doña Esperanza Mata Almonte - estaba encaminado a la limpieza y protección de la necrópolis prehistórica. En su transcurso se detectaron nuevas cuevas artificiales, enumerando en el informe ( 2 ) un total de 42. Durante esta última campaña se ha vallado una parte del yacimiento. Otra parte se encuentra en un terreno particular. La excavación y reconstrucción del conjunto megalítico no se realizó por falta de medios y tiempo.
Las calcarenitas, el soporte físico de las sepulturas, son muy vulnerables a la erosión eólica, a la lluvia ácida y a otras influencias negativas a causa de su mala cementación. El estado actual de las diversas cuevas artificiales y otras sepulturas que se encuentran en esta roca es el resultado de procesos de transformación provocados por los agentes físicos, el pastoreo y actuaciones del hombre moderno. En los años 60, durante la repoblación de Los Algarbes con eucaliptos, las máquinas que limpiaron y prepararon el terreno arrasaron la cubierta de varias sepulturas, causando destrozos y variaciones importantes en su morfología. Estas mismas máquinas arrasaron también el terreno donde se supone la ubicación del poblado que pertenece a la necrópolis.
Desde los trabajos de Doña Esperanza Mata no se han vuelto a realizar intervenciones planificadas; tampoco las campañas periódicas y regulares de mantenimiento y control, tal como ella aconsejó en su informe. Así la vegetación sigue creciendo de manera incontrolada y las raíces penetran en un gran número de sepulturas. Una de las cuevas artificiales más afectadas del recinto vallado es la Sep. Nº 1. Aquí la galería que lleva a una de sus entradas horizontales está ocupada por arbustos de tal espesura, que es imposible pasar por allí.
Después de las excavaciones de D. Carlos Posac Mon se volvieron a utilizar varias cuevas artificiales (sepulturas Nº 3, 4 y 5) para encerrar cerdos. La sepultura Nº 4 incluso se modificó con cemento. A pesar de estar vallado, los pastores han roto la malla en varios sitios y se utiliza el terreno para el pastoreo de caballos, cabras y vacas.
Con la tala de eucaliptos en mayo de 1.994, la empresa "Explotaciones Forestales", con sede en Huelva, produjo nuevos destrozos, bien por la maquinaria pesada, bien por las caídas de los troncos. Todavía queda por limpiar todo el yacimiento de ramas y otros restos que dejaron tirados por doquier y los nuevos rebrotes de los eucaliptos alcanzan otra vez más de 6 m de altura.
La sepultura más afectada por la tala de los árboles es la Nº 10, la única del yacimiento en forma de silo. Las vibraciones, originadas por la maquinaria pesada, hicieron caer las paredes y empezó a abrirse una grieta de gran tamaño en la parte superior. Durante los meses siguientes ésta aumentó su tamaño y había que cerrarla ante el peligro de un derrumbamiento total de la construcción. Para esto se utilizó una mezcla de cemento con un alto porcentaje de arena de arenisca del mismo estrato para obtener un coeficiente de dilatación lo más próximo posible al de la roca soporte.
Las fuertes lluvias de los años 1.995 y 1.996 pusieron al descubierto nuevas sepulturas y causaron al mismo tiempo destrozos en otras ya conocidas. Una de las más afectadas es la Sep. Nº 2, que está unida directamente a la gran galería de la construcción megalítica. También los grandes bloques de cubrición de la misma galería se han movido y algunos se han partido por falta de estabilidad estática. Lo más lamentable es la rotura del gran ortostato vertical en la entrada del monumento, el único con grabados en forma de cazoletas.
En la primavera de 1.998 se derrumbó una de las cuevas más grandes, destruyendo al mismo tiempo otra sepultura de forma circular que se encontraba por encima de ella en el mismo estrato. Otras cuevas no tendrán mejor suerte si no se toman ya medidas para su conservación. Por otro lado hay que señalar que en algunas de las sepulturas no excavadas, fuera del recinto vallado, afloran huesos humanos que son pisoteados día a día por el ganado vacuno que pasa por allí.
VALORACIÓN :
Sólo una pequeña parte del yacimiento ha sido excavado, lo que significa que posee grandes perspectivas para futuras investigaciones de los restos materiales y las construcciones arquitectónicas que conserva. La ocupación del lugar desde el Calcolítico hasta tiempos históricos con enterramientos típicos de las distintas épocas - construcciones megalíticas, cuevas artificiales, sepulturas circulares y antropomorfas ( todas excavadas en la roca ) - ofrecen principalmente la posibilidad de aclarar fechas que todavía no se conocen con exactitud. Ya Don Carlos Posac, que sitúa la necrópolis en la Edad del Bronce, anotó en su publicación que "estamos ante un yacimiento de larga perduración", manifestando en la descripción de los materiales líticos del ajuar de la Sep.1: "Casi todos estos cuchillos carecen de retoques laterales, detalle que parece indicar una reminiscencia neolítica".
Ante todo habrá que delimitar el yacimiento y realizar una documentación completa de lo existente dentro y fuera del recinto vallado, incluyendo un levantamiento topográfico y la planimetría. Hay que señalar que casi la tercera parte de la Necrópolis se encuentra en terreno particular, hecho que necesita una solución satisfactoria para las partes interesadas.
Es lógico pensar que a una necrópolis de estas características pertenece también un poblado importante. Hasta la fecha se han encontrado sólo varios sitios aislados que indican haber sido lugares habitados. En estos se detectaron en superficie concheros, piedras de molinos, cerámica, industria lítica, huesos, etc.
El yacimiento Necrópolis de los Algarbes ha sufrido y sigue sufriendo ataques de distinta índole que ponen en peligro su integridad. La acción de animales, sobre todo los de pastoreo, es la principal causa de su degradación. En principio es un problema de fácil solución. Para evitar la invasión del yacimiento por parte de ganaderos que siempre han utilizado el terreno habrá que pensar en medidas compensatorias que lo eviten.
Entre los otros factores destacan los de carácter climatológico como las lluvias y la erosión eólica (Levante). La última se podría contrarrestar mediante una repoblación de los alrededores con arbustos autóctonos que la reduzcan. El crecimiento incontrolado de plantas en el mismo yacimiento requiere un mantenimiento continuo, sobre todo para la eliminación de raíces que penetran en las sepulturas.
El yacimiento ofrece la posibilidad de ser acondicionado para visitas, creando así una oferta más dentro de los recursos turísticos de la región. Una sola persona podría ser capaz de realizar los trabajos de mantenimiento y guiar al mismo tiempo a los visitantes.
Desde 1.994 se ofrecieron de manera gratuita y con permiso de la Delegación Provincial de la Consejería de Cultura de Andalucía de Cádiz visitas acompañadas. En estas se informó a los interesados sobre las características principales del yacimiento y se les entregó también una hoja de información. Con esto se consiguieron disminuir notablemente las visitas incontroladas al yacimiento. Ya en 1.995 se registraron 706 visitantes y en los años siguientes aumentaron a más de 1.000 personas por año. Desde agosto de 1.997 no se ha podido seguir con esta labor a causa de la enfermedad del guía voluntario. Para visitas hay que pedir ahora permiso a la Consejería de Cultura.
Bibliografía:

(1) Posac Mon, Carlos, "LOS ALGARBES ( Tarifa ). UNA NECRÓPOLIS DE LA EDAD DEL BRONCE", en Noticiario Arqueológico Hispánico 4. Madrid 1975. Págs. 85 - 120 ( ver dibujos de los ajuares y de la sepultura ).

(2) Mata Almonte, Esperanza, : "INFORME SOBRE LA INTERVENCIÓN ARQUEOLÓGICA EN LA NECRÓPOLIS PREHISTÓRICA DE LOS ALGARBES ( Tarifa, Cádiz )", AEQUA, Cádiz, 1.995.

1 comentario:

Anónimo dijo...

con el calor que hace ahi dentro se debe estar muy fresco....
M.Q.T